GRANGE HILL
Si Estados Unidos es la industria de las teleseries, Reino Unido es sin duda el taller artesano: produce menos y en menor cantidad, pero su calidad es sorprendente. Una de las cosas más sorprendentes de las series británicas es su habilidad para sobrevivir no años, sino décadas. Y uno puede pensar que sí, que vale, que un culebrón tal vez puede durar varias décadas si el público es fiel y los guionistas no insultan la capacidad intelectual de su público (a fin de cuentas, Arrayán lleva diez años en antena), ¿pero una historia sobre adolescentes para adolescentes? Así ocurrió con Grange Hill, que se mantuvo en antena desde 1978 a 2008, sin traicionar nunca su espíritu. De hecho, los productores no estaban muy seguros de lanzar la serie en un primer momento, pues querían tratar temas reales sin caer en la comedia ni en la idealización, algo habitual en las series dirigidas a un público adolescente. Y por supuesto, los adolescentes crecían, se hacían mayores, abandonaban el colegio y eran sustituidos por otros, hasta el punto que los profesores eran los únicos personajes fijos, lo que con el tiempo (y el envejecimiento de parte de los espectadores) derivó en que sus historias personales también tuvieran sitio en la serie. Aunque nunca vi la serie, una amiga se enganchó completamente cuando llegó a Londres (casualidades de la vida, luego acabó trabajando en la BBC), y me iba contando las tramas y la evolución, sobre todo el final, que la sorprendió mucho: ni final espectacular a lo Compañeros ni sueño a lo Los Serrano, simplemente los estudiantes celebran que se han graduado y salen por última vez de las aulas. La vida sigue, un final lleva a otro principio. Este y otro tipo de series son justamente lo que me sorprenden del mercado televisivo británico, que parece tener un público que es capaz de ver una serie sin necesidad de que sea para toda la familia o que esté avalada por una productora estadounidense, y que lo mismo te desarrolla tramas de ciencia ficción como de adolescentes, comedias muy negras o culebrones al uso. A lo mejor, no es el formato lo que había que imitar, sino la calidad.
2011-06-09 08:54 | 6 Comentarios
Referencias (TrackBacks)
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Comentarios
1
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De: PABLO |
Fecha: 2011-06-09 12:10 |
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La BBC tiene una gran cantidad de series para quitarse el sombrero,y sorprende que con un presupuesto bastante corto(comparado con las series Americanas)hacen autenticas obras de arte que son las delicias del espectador,esperemos que mantengan el mismo nivel
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2
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De: Jose Joaquín |
Fecha: 2011-06-09 15:11 |
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Y la BBC Radio también está muy bien. Ahora ando escuchando "En las montañas de la locura", que han adaptado maravillosamente.
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3
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De: PABLO |
Fecha: 2011-06-09 16:27 |
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En que canal de la bbc radio lo oyes,indicame como lo oyes que eso tiene muy buena pinta
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4
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De: Jose Joaquín |
Fecha: 2011-06-09 17:49 |
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En el post de mañana lo comento. Se oye, eso sí, desde el propio PC.
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5
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De: CorsarioHierro |
Fecha: 2011-06-09 23:31 |
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Temporadas muy cortas. Nunca lo entendí-¿de qué viven los actores ingleses?- pero que supone un buen nivel...
... y que esta serie te la puedas ver en un santiamen: o sea, que me imagino que 30 años de serie británica igual son 200 episodios
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