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JUST ONE OF THE GUYS

Existen en Internet varias listas bastante recomendables de películas imprescindibles de los años 80, algunas centradas exclusivamente en las películas de adolescentes. Una de las películas que aparece en casi todas las listas es Just One of the Guys (Un chico como todos en España), una película de 1985 que se ha convertido en una obra de culto a pesar de que ninguno de sus actores ni actrices alcanzara la fama.

La película gira entorno a la vida de Terri Griffith, una chica de familia rica que sueña con ser periodista, pero cuya belleza hace que la gente no se tome sus aspiraciones en serio. Desesperada por ser juzgada por su talento y no por su cara bonita, aprovechando que sus padres se han ido dos semanas de viaje y la han dejado sola con su hermano adolescente salido, Terri decide convertirse en un tránsfuga del sexo y travestirse como un chico, acudir a un instituto cercano y ganar una competición de jóvenes periodistas.

La historia tiene, a priori, poco de original. En líneas muy generales la confusión recuerda a Príncipe y mendigo o Como gustéis de William Shakespeare, mientras que el tema de los tránsfugas de sexo que intentan conseguir algo que les está vedado en su condición actual ya se había visto en películas como Some Like Hot (Con faldas y a lo loco) a finales de los 50 o teleseries como Bossom Buddies a principios de los 80. Sin embargo, la película tiene un elemento bastante original, y es que el transfuguismo lo realiza una chica, dando un giro bastante importante a la historia, algo que no se veía desde que cincuenta años atrás Katharine Hepburn se vistiese de chico en Sylvia Scarlett.

Aunque la película es una comedia y no se plantea entrar seriamente en temas como la construcción de género, los estereotipos o las convenciones sociales, sí que se pueden observar de fondo. El propio hecho de que Terri tenga que fingir que es un chico para triunfar ya dice mucho sobre las concepciones de la época: el público sabía que un hombre lo tenía más fácil que una mujer a la carrera hora de desarrollar la mayoría de las carreras profesionales. El propio hecho de que la protagonista sea una chica, algo que no solía ser habitual en las comedias adolescentes (o se centraban en protagonistas masculinos, o se centraban en grupos mixtos), da un giro muy importante a la trama. Así, aunque la historia también está pensada para chicos (con algunos planos que se recrean en los cuerpos de algunas chicas y una escena en la que se ven brevemente los pechos de Terri), es obvio que la directora está haciendo una película que transmite un importante mensaje a las espectadoras que estén atentas: Este es un mundo de hombres porque lo controlan los hombres.

La película es entretenida pero sin grandes pretensiones. Tiene momentos divertidos, pero en muchas ocasiones se apoya en tópicos vistos ya mil veces (el matón, los profesores raros, el romance imposible con el mejor amigo, etc.). Los personajes son interesantes pero, quitando a Terri y su amigo/interés romántico, son estereotipos andantes. El ritmo no es especialmente ágil, y si bien no se hace especialmente pesada, llega a resultar larga. El final es un happy end bastante cogido por los pelos.

Interesante para matar una tarde aburrida o si se tiene interés en los estereotipos, sobre todo los adolescentes y los de género. O para dejarse atrapar por la nostalgia de los años 80.

2012-04-25 10:46 | 3 Comentarios