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BETTER OFF DEAD

Hay películas que nunca lograrán ningún premio, no serán motivo de tesis doctorales ni se repondrán en cine alguno por su veinte aniversario, pero que a pesar de todo son entretenidas y cumplen perfectamente con la función que los autores tenían en mente: divertir.

Better Off Dead, que en España se tradujo incomprensiblemente como Lecciones de amor a pesar de que en la película no se da ni una lección sobre el amor (de hecho, las únicas clases que se dan son sobre esquí y matemáticas), es una película de 1985 protagonizada por John Cusack que intenta atraer al público adolescente con todos los tópicos del instituto y el primer amor, aunque a eso hay que sumarle un sorprendente y alocado giro de humor surrealista que hace la película rara pero, al mismo tiempo, tremendamente refrescante.

La historia es bastante sencilla: Lane (el personaje de Cusack) tiene una novia llamada Beth, una chica guapa y popular que ha caído rendida a los pies del capitán del equipo de esquí. A lo largo de la película, Lane tiene que lidiar con la incomprensión de sus padres y los profesores del instituto, la tiranía de su jefe en la hamburguesería y la rivalidad con el nuevo novio de Beth. Sin embargo, Lane va a tener una aliada inesperada, Monique, una estudiante de intercambio francesa con la que acabará comenzando (obviamente) una nueva relación.

Hasta aquí, la película es un topicazo tras otro. Sin embargo, la historia se presenta de manera totalmente alocada, con un amigo que quiere ser yonki pero no encuentra drogas, un gordito acosador que no deja en paz a Monique, una madre que llega a cocinar algo tentacular y primigenio, un hermano que construye armas láser, un repartidor de periódicos psicópata obsesionado con los dos dólares que Lane le debe e incluso una hamburguesa imaginaria que canta. El resultado es una serie de situaciones a cada cual más absurdas que, además de ser entretenidas, le dan un tono muy refrescante a la película.

Además, es interesante ver cómo la historia trata algunos temas serios aunque de manera encubierta. El más obvio es la comparación entre la relación con Beth y Monique. La primera de estas relaciones es, ciertamente, con una chica muy atractiva y popular, pero Lane vive obsesionado con este primer amor y se limita a estar con ella sin hacer nada mínimamente productivo. Sin embargo, la relación con Monique es más madura, puesto que no se basa en una obsesión ni idealización, tampoco en un amor a primera vista, sino en haber ido conociéndose; el resultado es que su relación va a ser más productiva, porque encuentran muchas cosas en común (arreglar un coche, esquiar, etc.) que les hace estar más unidos.

A pesar de lo absurdo del humor y de que, al parecer, a John Cusack le pareció un horror, la película aprueba con notable en IMDb, AllMovie.com y Rotten Tomatoes, lo cual demuestra el atractivo que tiene para muchas personas. Sin duda, una gran elección para matar una tarde aburrida.

2012-03-14 09:54 | 7 Comentarios